¿En qué aspectos o acciones sentís que se ponen los valores en acción?
La sostenibilidad atraviesa todos los ámbitos de Teyma y no se limita a iniciativas amigables con el medio ambiente, sino también a acciones que generan valor en las comunidades donde opera la compañía.
Institucionalmente lo que hacemos, que ya lleva más de 16 años, son acciones concretas de inclusión social donde desarrollamos nuestras actividades. Estas acciones se enmarcan dentro de lo que denominados “Programa Alejandro Fynn” en honor a quién fue Presidente de Teyma e inició todo este proceso dentro de Teyma.
Otro eje de acción es el trabajo con personas privadas de libertad, en conjunto con la Dirección Nacional del Liberado y diferentes organizaciones. En esta línea, Teyma colabora con Quebracho en dos iniciativas: el Proyecto Cárceles, que se desarrolla dentro de establecimientos penitenciarios, y Quebracho Impulsa, orientado a la formación de jóvenes de contextos vulnerables, especialmente en la zona de Barros Blancos y Colonia Nicolich.
¿Cómo se involucran los colaboradores de Teyma en esos proyectos?
Hay un fuerte trabajo de difusión de lo que hacemos y de unir a los distintos actores en un objetivo común.
En muchos casos, parte de las horas de trabajo se destinan a los programas sociales de la empresa. Teyma habilita un espacio para que estos valores se pongan en práctica dentro del esquema laboral, fomentando que sucedan de manera natural.
El trabajo con personas liberadas es un tema de convicción y donde queremos aportar nuestro granito de arena en nuestra idea de contribuir al desarrollo sostenible del país, de hecho en lo que va de este año ya hemos contratado 35 personas liberadas (hombres y mujeres) que se han insertado en nuestras actividades, como cualquier otro trabajador de la empresa y ya llevamos varios cientos de libertados contratados desde que iniciamos con estas acciones hace más de 16 años.
Por otra parte, el mes próximo esperamos llegar a los 1.000 trabajadores privados de libertad contratados desde que iniciamos la actividad en nuestra empresa Etarey, donde estamos a cargo de los Servicios y Mantenimiento de la Unidad Penitenciaria N° 1 en Punta Rieles. Aquí las personas tienen trabajo digno, con salario, derechos y obligaciones como cualquier otro trabajador, y pueden aprender hábitos de trabajo para cuando vuelvan a integrarse a la sociedad.
¿Cómo conjugás los valores con tu vida laboral?
De la forma más natural posible, manteniendo coherencia entre el discurso y las acciones cotidianas. Entiendo que el liderazgo se basa en ser coherentes, transparentes y auténticos.
Para quienes lideramos la compañía, es fundamental que los colaboradores desarrollen un sentido de pertenencia. Todas las acciones que mencioné anteriormente contribuyen a generar arraigo y compromiso en quienes forman parte de Teyma.
En mi caso, busco ser coherente entre lo que digo y lo que hago, promoviendo valores como la inclusión, la responsabilidad social y la excelencia en cada proyecto. Estos principios están presentes tanto en la toma de decisiones del negocio como en la comunicación con los equipos y en los programas que impulsamos dentro de la empresa, así como en aquellos externos que apoyamos
¿Cuál es tu mayor convicción cuando se trata de liderar con valores?
La transparencia y la honestidad son la base para el desarrollo de cualquier actividad, ya sea social o profesional. Esa es la pauta que guía nuestro accionar y, fuera de esos principios, no hay negociación posible.
¿Qué le dirías a un dirigente de una empresa Pyme?
Que no hay crecimiento sin asumir riesgos. Eso sí, los riesgos deben evaluarse con rigor: no se trata de “tirarse a la piscina” si no hay agua. Pero si no se toman decisiones, no hay avance.
También le diría que desarrolle una cultura entorno a la innovación. Y no hablo solo de buscar y adoptar nuevas tecnologías, sino de revisar cómo se están haciendo las cosas. Medir, observar el mercado, buscar nuevas formas de operar y adaptarse con rapidez. La capacidad de ajustar el enfoque —“cambiar el chip” cuando hace falta y a tiempo— pienso es fundamental para construir un negocio sostenible.
Otro punto clave: rodearse de un equipo capaz y comprometido, con confianza mutua. Si el equipo no confía, no acompaña; y sin ese respaldo, se pierde fortaleza colectiva. Es fundamental valorar el trabajo conjunto y, con humildad, reconocer los logros individuales.
Desde nuestra experiencia, algo que funciona es ser transparentes con el equipo: sobre la situación del mercado, de la empresa y el rumbo que se está siguiendo. En Teyma, por ejemplo, revisamos cada año nuestro plan estratégico a cinco años, y lo hacemos con el equipo y de forma bien abarcativa. Analizamos la situación interna y externa, definimos objetivos claros y medibles, y a partir de eso, trazamos las acciones que nos permitirán avanzar.