Mucho más de lo que parece. En un mundo atravesado por cambios tecnológicos acelerados, ACDE se propone hacer una lectura profunda: la transformación no es solo digital, es también humana.
En la apertura y el cierre de la conferencia de Nicolás Jodal, la ingeniera Elisa Facio, presidenta de ACDE, nos recordó que el verdadero desafío está en adaptarse a las nuevas tecnologías sin perder de vista lo esencial: las personas siempre en el centro de las decisiones.
“Hoy nos convoca la inteligencia artificial, un tema que además de estar de moda, está marcando un antes y un después en el mundo empresarial y de la vida misma y que va a seguir siendo así. La inteligencia artificial está transformando el trabajo, la forma en la que decidimos y hacemos las cosas. En un contexto como el de Uruguay, país pequeño, con recursos naturales escasos y mercados exigentes, la IA no es una opción sino una necesidad para mantener la competitividad y seguir creciendo con inteligencia.
Las empresas deben seguir ofreciendo mejores productos, invirtiendo para crecer y dar más y mejor trabajo minimizando los impactos naturales negativos. Este es el aporte al bien común que las empresas han de brindar con más y mejor inteligencia. ACDE existe para acompañar a dirigentes de empresas que desean vivir su vocación de liderazgo promoviendo la dignidad de la persona humana y el bien común y esta vocación implica no rehuir a los desafíos de nuestro tiempo sino enfrentarlos con lucidez y esperanza.
Sobre IA no está todo dicho pero sí está claro que la persona humana debe estar siempre en el centro”.
En el cierre Elisa Facio reforzó los mensajes y la importancia de actuar con visión ética y valores y recordó la importancia de trabajar de forma articulada.
“Las preguntas son lo más importante. Si nosotros somos los que damos el sentido a lo que preguntamos y nos interesa; el sentido, los valores y el propósito de toda tecnología incluida la inteligencia artificial sigue dependiendo de nosotros.
Como dirigentes de empresa tenemos una gran oportunidad de incorporar la Inteligencia artificial en nuestros procesos, backoffice y productividad cotidiana. También tenemos una gran responsabilidad de planificar con visión ética el uso de esta inteligencia artificial.
En ACDE creemos que este camino no se transita en soledad. Contamos con nuestros grupos de reflexión y Grupos de apoyo al Desarrollo Empresarial, justamente para acompañarnos en este proceso, compartiendo experiencias, preguntas y aprendizajes. Necesitamos unirnos como comunidad empresarial y dialogar con todos los actores del mundo del trabajo: sindicatos, academia, educación pública y privada y el estado. Tal como estamos haciendo con el Programa Liberados”.